Pintura acrílica con flores y plantas medicinales
Proceso de creación de pinturas
En este proyecto, me he enfocado en la representación de flores con propiedades curativas y preventivas. Lo he iniciado con la representación de la manzanilla, la caléndula, la ruda y la lavanda en un formato de álbum desplegable. Además de ser visualmente atractivas, estas plantas tienen un gran valor en fitoterapia. A continuación, te comparto el proceso de creación de estas pinturas, con el objetivo de destacar tanto su estética como su significado terapéutico.
Bocetos iniciales y pruebas técnicas
Para definir la composición y experimentar con diferentes técnicas, probé primero con acuarela y tinta sobre un fondo claro en mi libreta de esbozos. Sin embargo, los resultados no me convencieron, por lo que opté por acrílico sobre fondo negro.
Estos bocetos me han ayudado a organizar la disposición y el color de cada tema floral, manteniendo una continuidad visual y armonía al desplegar las páginas. También evalué el tamaño de las flores en función del diseño y su impacto al abrir el álbum.
Materiales
Para realizar estas pinturas, he optado por papel de 300 gramos, un grosor que resiste bien la pintura acrílica. Si usas un papel más delgado, es posible que necesites prepararlo para evitar que se arrugue.
Decidí doblar la lámina quedando como un álbum desplegable de arte, lo que permite que funcione como un libro de referencia compacto y decorativo a la vez.
Para el tratamiento pictórico, me he inclinado por mantener un estilo expresivo, priorizando las texturas y manchas sobre el realismo, lo que creo que me ha permitido crear una atmósfera de captación de la energía y la forma de cada planta de manera más abstracta.
Si decides hacer estos temas en láminas sueltas también es otra opción.
Materiales que necesitarás
- Soporte: puede ser un lienzo de tela o papel de dibujo de 270 gr o superior.
- Pinturas acrílicas: la paleta que he utilizado es muy común: blanco, amarillo, rojo bermellón, magenta, azul celeste o cyan, azul ultramar y verde vejiga.
- Pinceles: Prueba con diferentes tamaños, los efectos variarán según sea tu pincelada. Los pinceles planos son útiles tanto para trazos finos (al usar el borde estrecho) como para cubrir áreas más amplias. Un ejemplo de esto sería cuando realizamos hojas con una pincelada. Los redondos ofrecen texturas interesantes, especialmente según la cantidad de pigmento o mezcla que se utilice.
- Espátula: Aunque puede aportar efectos interesantes en este tipo de temas, yo solo la he utilizado para organizar la pintura en la paleta; en esta ocasión, he preferido trabajar exclusivamente con pinceles.
- Paleta: Te recomiendo las que te proporcionan una base clara o blanca. Te será más fácil identificar los tonos de la mezcla que quieres poner en el lienzo o soporte final. Yo he utilizado una hoja de paleta de papel desechable que además me ha evitado perder tiempo en limpieza y reduciendo el gasto de agua.
Aplicación de la pintura
Para dar profundidad y establecer la base, inicié con una capa de tonos neutros en las flores, permitiendo que el color destaque sobre el fondo negro. En algunos casos, también dejé áreas más oscuras para crear contraste y volumen.
En esta etapa, trabajé con pinceles medianos y otros redondos finos, ligeramente desgastados. A veces son una buena opción para conseguir algunas pinceladas más precisas o naturales.
Mezcla de Colores y Texturas
Para las flores, mezclé cuidadosamente los colores utilizando una paleta de tonos naturales. Por ejemplo:
- Manzanilla: Amarillos suaves, blancos, y un toque de verde para el centro de la flor.
- Caléndula: Rojo cadmio o bermellón con amarillo, naranja y ocre.
- Ruda: Verdes oscuros con amarillo y blanco para las puntas de los pétalos.
- Lavanda: Diferentes tonos de lila, los logré con magenta y azul cyan. Para sombras más profundas, usé azul ultramar y magenta. Añadí blanco con precaución para evitar tonos demasiado desaturados.
Resaltando Volúmenes y Sombras
Para dar volumen, apliqué luces y sombras, utilizando tonos oscuros en áreas específicas y aprovechando el fondo negro para obtener efectos sin tener que pintar toda la superficie. Alterné pinceles planos y redondos, logrando equilibrio entre forma y color, lo que da movimiento y sensación de energía a las flores.
Las luces las apliqué en áreas donde naturalmente incidiría la claridad, guiando el ojo del espectador a puntos estratégicos de la obra.
Acabado y Protección de la Obra
Una vez que la pintura está completamente seca, puedes aplicar un barniz protector para resaltar los colores y texturas. Esto se suele realizar para asegurar la durabilidad de la obra. La pintura deberá estar completamente seca antes de aplicar el barniz, pues si has puesto texturas muy gruesas, a veces puede dar la sensación de que ha secado por completo pero en el interior todavía está húmeda. Así que yo suelo esperar unas semanas, antes de realizar este paso.
Share this content: